El día de hoy me comentaron los compañeros Manuel y Pablo, que el día de ayer, hubo un derrumbe de una parte de la loma, en donde están trabajando actualmente. El derrumbe sucedió del lado en donde estaba trabajando Pablo, escarbado la zanja, para continuar el cimiento de la barda. Afortunadamente, dicho derrumbe, paso cuando Pablo había ido a la tienda a comprar un refresco y, al regresar, Manuel le comentó a Pablo lo que había pasado.
Estos son algunos de los riesgos de trabajo que los distraídos
transeúntes desconocen e ignoran y, que ahora, que está cerrado el panteón, solo se acercan para preguntar: ¿para cuando se abrira nuevamente este.
Antes
Después